El cultivo del tomate es uno de los más importantes en cualquier huerto que se precie, pero el tomate es un cultivo delicado y que se ve atacado por innumerables plagas y enfermedades.
En este articulo queremos daros a conocer las plagas y enfermedades más habituales en el cultivo del tomate, si lo que necesitáis es información sobre como cultivarlo correctamente os recomiendo que visitéis el artículo «Guía del cultivo del tomate»
Indice de contenidos
Plagas del tomate
Oruga del tomate (Heliothis armigeru Hb.)
Lepidóptero que ataca en su fase larvaria, en primer lugar, el sistema foliar, pero el daño mayor que infiere a la planta lo realiza atacando los frutos, en los que produce verdaderos agujeros durante su penetración, por lo cual aquellos quedan depreciados.Se puede combatir con Nacillus Thuringiensis y tierra de diatomeas.
Gusanos grises (o) «dormidores» (Agrotis sp.)
Lepidópteros nocturnos cuyas larvas devoran la base del tallo de la planta, por lo que ésta se marchita. El empleo de tierra de diatomeas en el tallo de la planta y en él propio sustrato, así como los tratamientos a la base de la planta con aceite de neem en el riego puede ayudar a eliminar la plaga.
Rosquilla negra del tomate (Spodoptera littoralis Boisduval)
Produce daños en hojas y frutos en su fase larvaria, Las aplicaciones de, Bacillus thurigiensis y tierra de diatomeas es el mejor método de lucha frente a este lepidóptero nocturno. Las trampas cromáticas también pueden ayudar en su control.
Gusanos de alambre (Agriotes sp.)
Coleópteros cuyas larvas atacan las partes radiculares del tomate. Los medios de lucha más señalados son los mismos que se indicaron como aplicaciones al suelo en el caso de los gusanos grises. Los riegos con purin de ortiga también pueden ayudar a mantener la planta sana y libre de estas plagas.
«Minadores o submarinos» (Liriomyza bryoniae Kltb, L. trifolii Barg, L. huidobrensis Blanchard)
Díptero que origina galerías irregulares en hojas, entre las dos epidermis. Los tratamientos con insecticidas naturales como el aceite de neem aplicándolo en riego y fumigando la planta con Bacillus thurigiensis y tierra de diatomeas.
Tisanópteros
En los últimos años se han detectado en algunas zonas graves ataques de Frankliniella occidentalis (Pergande), cuyo control es dificultoso y ha sido abordado en otros cultivos, como la lechuga y el fresón. El principal problema de esta plaga se debe a su carácter de vector del «virus del bronceado» (TSWV). La lucha biológica con Orius, Ambliseius, etc. se ha mostrado eficaz en invernaderos de la provincia de Alicante. Puedes saber sobre los trips más en este artículo del blog.
Nematodos
Diversos géneros de nematodos pueden atacar a las raíces de tomates, provocando el enanismo de las plantas, el amarilleamiento de las mismas y algunos de ellos inducen la formación de quistes.
Para alejarnos de nuestro sustrato podemos cultivar tagetes, ruda, caléndula, dalia, margarita piretro entre las plantas de tomates o en cualquier bancal que contenga solanáceas y los mantendrá alejados.
El único método efectivo que se puede utilizar en ecológico es la solarización o la biosolarización pero requiere que el cultivo se quede sin plantas para que tenga mayor efectividad.
Enfermedades criptogámicas del tomate
Hongos vasculares
Entre los más importantes pueden citarse, por un lado, aquellos que provocan la destrucción de los haces conductores de la planta, como Fusarium oxysporum Schl. var. lycopersici (Brushi) Wr. y Verticillium albo-atrum Reinke et Berth.
Por otra parte, cabe hablar del hongo Pyrenochaeta lycopersici Schneider-Gerlach., que produce el denominado «corky-root» o enfermedad de las «raíces leñosas» en numerosas hortalizas, además del tomate, como melón, pepino, berenjena, etc. Esta enfermedad se manifiesta por la necrosis de numerosas raicillas, un aspecto engrosado y lignificado de las raíces principales, las partes aéreas se desecan y el desarrollo de la planta, por último, queda paralizado.
La desinfección de los suelos y el injerto sobre portainjertos resistentes son los medios de lucha preventiva más eficaces frente a estas enfermedades del tomate.
Mildiu del tomate (Phytophthora infestans (Mont.) De Bary]
El mildiu produce en principio manchas amarillas que más tarde se necrosan y que avanzan desde los márgenes de las hojas hasta producir la desecación total de las mismas. También puede desarrollarse sobre los tallos y los frutos.
Su proliferación se produce en un intervalo de temperaturas muy amplio (entre 10 y 25 °C), resultando muy favorecido por las altas humedades ambientales y por la lluvia. Si quieres saber cómo combatir el mildiu de forma ecológica puedes leer el post que hemos dedicado a este hongo en nuestro blog.
Alternaria del tomate (Alternaria solani (Ell y Martín) Sor.]
Esta enfermedad del tomate provoca la aparición en las hojas de manchas más o menos redondeadas, de color negruzco, en torno a las que existen círculos concéntricos delimitados por un halo amarillento. Puede también desarrollarse sobre tallos, sépalos y frutos. Su desarrollo requiere regímenes térmicos más elevados que el mildiu y se combate de la misma forma que el mildiu.
Septoriosis del tomate (Septoriu lycopersici Speg.)
Esta enfermedad del tomate ataca a hojas y tallos del tomate, en los que origina unas manchas de pequeño tamaño y color marrón, rodeadas de un halo amarillento. Se combate de la misma forma que el mildiu.
Cladosporiosis del tomate (Cladosporium fulvum Cke. sin. Fulvia fulva. (Cooke) Cit.)
Ataca a las hojas y sépalos, produciendo en el envés foliar un moho grisáceo que después adquiere un tono violeta. Las hojas se vuelven amarillas y finalmente se secan. Se desarrolla mucho en los invernaderos, puesto que las condiciones de humedad relativa alta favorecen su proliferación.
Los mejores sistemas de combatir esta enfermedad pueden cifrarse en aumentar la aireación de los invernaderos, así como realizar tratamientos preventivos con cola de caballo. o cobre. Procederemos igual que para combatir el mildiu.
Botrytis del tomate (Botrytis cinerea Pers)
La botrytis es una enfermedad del tomate frecuente en el cultivo bajo invernadero, donde prolifera mucho por las altas condiciones de humedad. Desarrolla un micelio algodonoso sobre los frutos, ocasionando podredumbres blandas. Realizar tratamientos preventivos con cola de caballo puede funcionar,pero podeis saber todo sobre la botrytis en este post.
Otras enfermedades criptogámicas Sobre las plantas: Pythium, Rhizoctonia, Sclerotinia, Stemphylium, etc. Sobre los frutos: Phoma, Phomopsis, Rhizopus, etc.
Enfermedades bacterianas del cultivo del tomate
Chancro bacteriano (Corynebacterium michiganense (E. F. Sm.) H. L. Jens] (sin. Clavibacter michiganensis ssp. michiganensis David et al.)
Esta enfermedad del tomate provoca marchitamientos bruscos de los foliolos situados a una parte del raquis, mientras que la zona peciolar de inserción con el tallo, presenta necrosis en herradura y los tallos se agrietan y necrosan. Los frutos pueden presentar pequeñas manchas en forma de «ojo de pájaro».
Otras bacteriosis del cultivo del tomate
Xanthomonas vesicatoria (Doidge) Dowson y Pseudomonas tomato (Okale) Alstatt. Producen manchitas puntiformes o de mayor tamaño en tálamos florales, hojas y frutos. Pseudomonas corrugata Roberts-Scarlett, que produce necrosis en el interior de los tallos.
Todas las bacteriosis suelen atacar con humedades ambientales altas. La utilización de variedades resistentes, aplicaciones preventivas con oxicloruro de cobre son los medios de lucha de que se dispone actualmente.
Enfermedades viricas y micoplasmosis en el cultivo del tomate
Virus del mosaico del tomate (TOMV)
Esta enfermedad del tomate es una cepa del virus del mosaico del tabaco (TMV). Produce un mosaico amarillento o blanquecino en hojas. La planta detiene su crecimiento y los frutos pueden madurar irregularmente, produciéndose en su pulpa necrosis marrones. La preinmunización, junto con la resistencia genética son los mejores medios de lucha de que se dispone. Esta virosis se transmite adosada a las semillas (ep. 6.1.14.) y por transmisión mecánica.
Virus del mosaico filiforme
Esta enfermedad del tomate se manifiesta mediante una detención del crecimiento de las plantas, las hojas aparecen deformadas con mosaico y presentan una tendencia a transformarse en hilillos. A veces estos síntomas pueden ser producidos por el virus del mosaico del pepino incluso por el TOMV. Sin embargo, algunos autores piensan que puede ser un virus distinto, que se transmite por pulgones.
Virus del mosaico del pepino (CMV)
Puede provocar mosaicos y hojas liliformes, síntomas que pueden aparecer mucho más intensos si se produce un ataque conjunto con el TOMV. Se transmite principal mente por pulgones.
Virus del listado doble del tomate
Parece ser el resultado de la asociación de TMV y el Virus X de la patata, produciendo bandas en tallos y manchas severas en hojas y frutos.
Virus del Bronceado del tomate, TSWV (Tomato Spotted Wili Virus)
Produce manchas necróticas en hojas, manchas bronceadas en frutos, frutos deformes, etc. Es transmitido por Frankliniella occidentalis y puede atacar a especies muy diversas, como pimiento, pepino, lechuga, alcachofa, crisantemos, etc. Es una de las enfermedades virales más graves en la actualidad en la horticultura mediterránea española.
Virus del rizado amarillo del tomate, TYLCV (Tomuto Yelow Leaf-Curl Virus)
Esta enfermedad del tomate es un virus transmitido por Bemisia tabaci, origina enanizamientos, foliolos pequeños, recurvados, quebradizos y cloróticos. Es una virosis que actualmente crea muchos problemas en algunos países de la Europa mediterránea (entre ellos, España).
Stolbur
Esta enfermedad del tomate es una Micoplasmosis transmitida por cicádulas que produce flores anormales que muestran una estructura foliácea de órganos, También ocasiona entrenudos cortos, hojas violáceas, frutos con escaso desarrollo, con manchas blanquecinas y endurecimientos superficiales, etc.
La lucha contra los vectores es el mejor sistema de hacer frente a esta enfermedad.
Otros problemas típicos en el cultivo del tomate
La asfixia radicular. Se produce por un exceso de riegos, por un encharcamiento del suelo. El pimiento es muy sensible a este problema. Primero se pudren las raíces y al final la planta muere.
Rajado del fruto. Se produce por aportes irregulares de agua y/o altos niveles de humedad relativa en frutos maduros cuando se hincha el mesocarpio por un exceso de agua y rompe la epidermis. Hay unas variedades más sensibles que otras.
Necrosis apical. Es una alteración del fruto causada por falta de calcio durante su desarrollo. El aumento rápido de la temperatura, la salinidad elevada, el estrés hídrico y térmico, son factores que favorecen este fallo y también es muy diferente la sensibilidad según las variedades. En Galicia es habitual debido a la escasez de calcio en nuestras tierras.
Quemaduras de sol. Los frutos aparecen con manchas como consecuencia de su exposición directa a fuertes insolaciones.
Quiero recibir mas informacion sobre el cuidado de tomates y morrones.muchas gracias..
Puedes leer otros artículos que tenemos en el blog https://herbacelta.es/huerto/cultivo-del-tomate/ y para el pimiento https://herbacelta.es/huerto/el-cultivo-del-pimiento/
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